Donde otros ven sistemas, él siempre vio personas. Juan Carlos Albertella mantiene con el espíritu de la empresa fundada hace más de (no se cuantos años) por su madre, (no me acuerdo el nombre), en MGV Seguridad: construyó una forma de trabajar basada en el compromiso, la respuesta inmediata y el trato humano.
Su mayor orgullo no son los años de experiencia, sino saber que cada alarma instalada puede marcar la diferencia en la vida de alguien. Porque cuando se trata de seguridad, para él no hay cliente chico ni problema menor.
Todo lo que hacemos, lo hacemos con esa misma convicción: cuidar como si fuera para nosotros.